Vivir en el ahora

febrero 2023

Queridos todos:

Intenté escribir esta carta hace un par de días y no lo logré. No pude encontrar desde donde escribir, desde donde poder plasmar lo que es para mí vivir en el ahora. Últimamente lo oímos muchas veces, lo leemos en distintos lugares y lo utilizan gran número de personas y no pueden negar que suena bien, ¿a poco no?

Vivir en él ahora se vuelve como una especie de garantía, como si con ello fuera posible tener felicidad instantánea, y es que comienzas a imaginar que si lo alcanzas has logrado la paz y serenidad que toda alma busca.

Y entonces uno comienza a sentirse inquieto, y a preguntarse ¿qué será eso de vivir en el ahora?

Para poder contestar a esa pregunta busqué un poco en mis frases y me encontré con esto de Naropa:

Seis consejos:

1. No recuerdes, deja ir lo que ya pasó
2. No imagines, deja ir lo que puede venir
3. No pienses, deja ir lo que sucede ahora
4. No examines, no trates de interpretar nada
5. No controles, no hagas que algo suceda
6. Descansa, relájate, ahora y descansa

Lo leí y me dio ansiedad el pensar en lo lejos que estoy de alcanzar estos conceptos, pero escribiré para ustedes el ejercicio de mis avances en los últimos años y rompiendo un poco la primera regla recordaré lo que me pasaba antes y ya no me pasa.

Antes podía atormentarme por horas con pláticas internas que sostenía conmigo y donde debía, de acuerdo con mi análisis, de haber dicho algo más, algo distinto, algo más inteligente, algo más audaz, … me atormentaba con algo que ya había sucedido, con algo que ya no podía cambiar. Recuerdo una vez que llevé a mi hijo a la escuela y me sentí evaluada por la maestra, si, si los traumas de madre que trabaja que está llena de culpa y siente que la maestra también la culpa, me atormentó tanto el pensamiento de haber podido decir tantas cosas. Ahora eso ya no me pasa, ya no sostengo ese tipo de conversaciones conmigo y eso me parece que es el comienzo de vivir en el ahora.

Hablando del segundo punto, no imaginar. Hace pocos años, esperaba que llegaran los mejores tiempos, que mis relaciones con las personas cambiaran, mi trabajo cambiara, la gente cambiara, esperaba todo el tiempo por ese futuro que iba a ser mucho mejor que el momento actual.

Por ejemplo, cuando mi primer hijo era un recién nacido soñaba con el día que dijera mamá, en el trabajo cuando no tenía una buena relación con mis pares esperaba que en el futuro algo sucediera que cambiara la situación.

El hoy no me era suficiente, sin embargo, el futuro sería mejor.

Como uno de mis hijos que lleva varias semanas deseando que ya sea navidad. Ahora eso trato de evitarlo, las cosas tienen que estar bien para mi hoy, si hoy no están bien, entonces mañana tampoco lo estarán, no pienso en el futuro, pero tampoco busco que pase el tiempo para que algo suceda. Y parte de lo que me ayuda a vivir en él ahora es que he aprendido a disfrutar mis emociones, ha poder darme cuenta de que los nervios, la incomodidad, la emoción, la inquietud, todas esas emociones son un reflejo de estar vivo.

Hace algunos años me tocó recoger un premio que nos habíamos ganado en el trabajo y me tocaba recoger el premio y dar unas palabras. Vestido largo, peinado de salón, yo me sentía en los Oscares, así tal cual, estaba tan nerviosa que me temblaban las rodillas. Cuando empecé a hablar notaba todas mis emociones en mi timbre de voz, disfruté cada instante, ¿cuándo en la vida me iba a pasar otro evento así?

Probablemente nunca, y sentir que te tiemblan las rodillas y que se nota la emoción en tu timbre de voz son de esas emociones que te hacen apreciar estar vivo.

Tercer punto, no pienses. Ahora sí que esta difícil, muy difícil, yo pienso mucho y de todo. Quizás es de lo más reciente que he trabajado, fíjense que yo pensaba mucho cuando iba en el coche, y si emocionalmente me sentía un poco bajoneada, todos mis pensamientos me bajoneaban más. Hace algunos meses comencé a salir de mi zona de confort, a retarme y cambiar mis hábitos y uno de los que he cambiado es que ahora cuando voy sola en mi coche escucho podcasts, libros, o lo que sea que me mantenga atenta. Esto me ha beneficiado mucho, me quita de mis pensamientos recursivos y me permite enfocarme en algo más. Ahora que lo escribo me doy cuenta de que salir de mi zona de confort también ha implicado bajarle un poco a mis momentos de pensar.

No examines, esa si se las debo. Yo todo analizo, todo reflexiono, todo trato de entenderlo, catalogarlo y aprender algo, bueno creo que cuando hago una sesión de coaching si aplica. He aprendido a no encuadrar lo que escuchas bajo tu interpretación. Estar abierto a entender al otro es abrir un infinito de posibilidades, es maravillarte de como los otros piensan distinto a uno.

No controles, bueno de esto hablaremos en un episodio.

Para mí, de las cosas más importantes que tiene el vivir en él ahora es el estar donde estás, por ejemplo, no usar el celular mientras hablas con alguien, tener unos minutos para la gente que quieres, darte el tiempo de estar ahí con el otro. Y al hacerlo escuchar y atender.

Y me despido dejándoles algunas preguntas para reflexiones futuras:

¿Qué no me gusta de mi vida hoy que ando buscando un futuro mejor?

Si algo que hice ayer no me gustó, o algo que sucedió el mes pasado, o el año pasado, ¿qué puedo hacer hoy para que no me vuelva a pasar?

Emociones, ¿qué me hace sentir la vida en este momento?

Gracias por leerme.

Besos

Rocío